Yucatecos viajando a Estados Unidos
No cabe la menor duda que el yucateco, que se cuece aparte, es todo un espectáculo cuando viaja, si no, juzguenlo ustedes mismos....
El
vuelo
Bueno, pues
el viaje comienza, por supuesto, desde que el yucateco llega al aeropuerto
de Mérida, con dos maletas por persona, desde luego, porque hay
gente que carga hasta la almohadita o el trapito que "huele" desde que
era un niño y no ha lavado jamás. Pero no nos desviemos
del tema, además de sus dos maletas tamaño gigante, el yucateco,
normalmente, carga un maletín que le llama "de mano", que no lo
es en absoluto, sino que es una maleta mediana y además se dá
el lujo de ignorar los avisos que advierten sobre el tamaño de las
maletas que pueden llevarse con uno en el avión.
Al momento
de abordar, el yucateco jamás hace caso de las indicaciones del
personal de la línea que indican que primero deben abordar los pasajeros
con asientos de primera clase y las personas que viajan con niños
y hacen la fila desde media hora antes de la hora de abordar, ¿no
se habrán dado cuenta que los asientos son numerados?. Una
vez arriba del avión, detienen a toda la fila que viene atrás
porque ellos están tratando de acomodar el "maletín de mano"
en algun lugar, y por supuesto, en ninguno cabe; una vez que deciden quitarse
del pasillo para que los demás puedan acomodarse, la aeromoza tiene
que quitarles el dichoso maletin y mandarlo a registrar para que se vaya
en el equipaje, lo cual desde luego, retrasa aunque sea unos minutos el
vuelo.
Una vez
que se sirve la comida, no falta el "yuca" que queda encantado con los
trastecitos y los cubiertos y los guarda en su bolsa o también el
que no se comió su sandwich y lo mete a su bolsa "por si le dá
hambre después". Normalmente si al "yuca" le tocó el
asiento de la ventanilla, la cierra y no deja ver a nadie el paisaje desde
las alturas, pero eso si, se levanta al baño no menos de 35 veces
durante el vuelo y la persona del centro y del pasillo tienen que levantarse
las mismas veces para dejarlo pasar, peeero, pregúntense ¿¿¿¿cuando
es uno de los momentos que mis amigos yucatecos escojen para ir al baño????
por supuesto que cuando están sirviendo la comida y, además
de que el carrito está en el pasillo y se tienen que meter en otro
asiento para pasar, hacen que uno tenga que levantarse con su charola,
su vaso, su lata de diet coke y su servilleta en la mano, ¿si o
no?
Ahhh!!!
y por poco se me olvida mencionar a los que aplauden cuando el avión
aterriza, qué pena!!
La
Llegada
El gran
momento ha llegado, el avión aterriza y a pesar de que la voz del
micrófono nos dice que no nos levantemos hasta que el avión
se detenga por completo, NADIE hace caso y no solo se levantan, sino que
empiezan a bajar el equipaje de mano sobre las cabezas de la demás
gente y se paran llenando el pasillo mientras el avión se encamina
a su sitio. Al bajar, todo el mundo corre materialmente a buscar
la banda del equipaje, como si fuera tan rapido que las maletas llegaran
allí, aaahhhh pero eso si, si en la familia hay 6 personas, niños
y adultos, todos se paran junto a la banda del equipaje y no dejan sacar
las maletas de los demás con comodidad. Ya con todas las maletas
en el carrito, se dispone a ir a abordar el autobús de la rentadora
para recoger su coche, cuando dicho autobús llega y toda la gente
ya está arriba sentada, al yucateco se le ocurre que debe tomar
la primera foto del recuerdo y comienza a buscar su cámara, por
supuesto antes de subir al camión, hasta el fondo de su maleta y
acomoda a toda su familia delante del autobús de "Hertz" para que
también salga en la foto, hasta me parece oir lo que dice:-"Ríanse
familia, la primera foto del viaje".
Ya con su
coche rentado, que normalmente el yucateco pide un coche para 4 pasajeros
cuando son 6 de familia, para ahorrarse unos dolaritos y al "chato" y al
"roger" los llevan en las piernas, "al fin que están flaquitos",
emprende el recorrido por la carretera hacia Orlando. Cuando hay
que cargar gasolina y bajarse a hacer pipí, en los nuevos baños
de monedas, el yucateco mete su "quarter" y no deja que se cierre la puerta
para que entre toda la familia por el mismo precio, ¡¡"estos
gringos hasta la wishada te cobran, máre"!!
El
Parque
¡¡¡Pobres
parques de diversiones cuando les cae un yucateco, y en grupo, peor!!!
¿Se
han fijado como el yucateco siempre acelera el paso cuando se acerca a
la entrada de algun juego para ganarle a todos el lugar en la fila?, no
me canso de decir ¡qué pena!, ¡qué oso!, hasta
dan ganas de hablar francés o alemán para que no nos reconozcan.
En las atracciones
donde se entra a un teatro, la más elemental educación nos
indica que debemos corrernos hasta el final de las butacas, pero para el
"yuca" eso es algo inconcebible y tiene que sentarse en los lugares del
centro, aunque eso implique que detenga al resto de la fila. Y, ¿qué
me dicen de cuando hacen la "cola" para comprar su comida?, esperan hasta
que les toca su turno para preguntarle a toda la familia qué van
a comer y si la hamburguesa la van a querer con cebolla o sin cebolla,
si la coca vá a ser "diet" o normal.
Algunas
atracciones prohiben tomar fotos o video, pero, pregúntense ¿quien
es el que saca su cámara de video? ¡acertaron! ¡un yucateco!,
claro, si acaba de comprar su "handy cam" -"¿cómo no vá
a filmar el juego?"-, además, -"¡pagar tanto por
la entrada para que no dejen a uno ni tener un recuerdo, me fregué!"-.
Podría
yo pasar horas enteras escribiendo sobre los incidentes en los parques,
las arbitrariedades en las filas, las burlas a las medidas de seguridad
y las faltas totales de la más elemental educación y roce
social, pero desafortunadamente el tiempo y el espacio son limitados y
ya me urge estrenar ésta página.
Las
compras
¡¡¡¡AAAhhhhh!!!!
cómo me gusta este tema, porque comprar es lo máximo y, por
supuesto, el yucateco tiene su estilo.....
Los favoritos
de mis paisanos, K-Mart, Wall-Mart, Target, Toys R´Us,
Wallgreens, Marshalls, etc., etc., las cuales son divinas para comprar,
pero ¿cuál es el pecado de la mayoria de los yucas?, pues
que como son tiendas de descuento, les dá pena decir que compraron
allí y entonces empiezan a inventar que lo compraron en cualquier
otra tienda con nombre más elegante. Es bien sabido que la
mayor parte de la gente aquí vive del "qué dirán",
del "qué marca usas" y todas esas boberías. En fin,
es todo un espectáculo ver a esta gente comprando, hay las gorditas
que se sienten en el paraíso porque allí si que hay tallas
"plus" y cuando van de tiendas, se surten como para 5 años, hasta
parece que les van a arrebatar la ropa y las cajeras no salen de su asombro
cuando ven eso.
Hay otro
tipo de personalidades, los que compran algo en alguna tienda, una cámara
por ejemplo, están convencidos de que les dieron un super precio,
pero después se dedican a recorrer todas las tiendas preguntando
el precio del mismo artículo, solo para darse cuenta de que hicieron
una compra apresurada y en todos los demás lugares costaba la mitad,
pero siempre les queda el pretexto y el consuelo de decir -"es que donde
la compré, me regalaron un calendario del año 2000, por eso
me costó un poco más...."-, también hay los que recorren
la tienda durante 7 horas, se prueban, revisan, llenan su carrito, lo vuelven
a vaciar, lo vuelven a llenar, y al final de cuentas salen con una sola
compra: unas chanclas verde neón de $1.99, y además, felices
por su compra.
Por otro
lado, sobre todo la gente más grande, lo que busca es precio, no
importa si la blusa está fea, le falta un botón o le queda
un poco apretada, si cuesta menos de $4 dólares, ¡me la llevo!,
y cuando vuelven a la blanca Mérida, a todo el mundo le andan mostrando
su adquisición diciendo, -"mira esto, $4 dólares me
costó"-.
Luego de
las compras, casi siempre apresuradas, viene la angustia del regreso, ya
sabes, los trucos en la aduana, el quitado de etiquetas, arrugar la ropa
para
que parezca usada, revolver los calzones sucios con la ropa para que a
la señorita que nos revisa le dé asco agarrarla, y el ensayo
de argumentos para decir:-"bueno, si yo me fuí 10 dias, tengo derecho
a 30 pantalones y 30 camisas, a fin que yo digo que me cambio 3 veces al
día"- ó -"el game-boy lo llevo en mi bolsa, junto
con los chocolates y el regalo de la tia Chayito, a fin que ahí
casi nunca revisan"-, ¡¡¡sencillamente geniales!!!.